A un mes del evento en Asís con el Papa, la activista de ecología integral tailandés habla: “Obligados a resolver los problemas de los adultos. Gracias Papa Francisco por haber llamado la atención sobre estos temas”

Por la redacción

ASÍS (ITALIA) – No solo jóvenes sino también adolescentes entre los participantes a Economy of Francesco, la grande comunidad que firmará un Pacto con el Santo Padre para una nueva economía el próximo 24 de septiembre, al concluir los tres días previstos del 22 al 24 de septiembre de 2022. La comunidad, que durante estos tres años no ha dejado de reunirse y trabajar online, está formada por una veintena de jóvenes menores de edad de diferentes países, entre los cuales se encuentra Ralyn Satidtanasarn, llamada Lilly, una jovencita activista de le ecología integral tailandesa que desde hace años lucha contra el uso del plástico.

Aun si la mayor parte de los adolescentes son italianos, también hay chicos entre los 13 y los 17 años, provenientes de Siria, Vietnam, Tailandia, Eslovaquia y Brasil, comprometidos en iniciativas como la de #ZeroHunger, (Hambre cero), y otros interesados a los temas de ecología integral. Presente también una joven brasileña, involucrada en el proyecto Pacar School, nacido al interno de EdF.

“Este tiempo – afirma Luigino Bruni, director científico de Economy of Francesco – es un tiempo de nuevo protagonismo de los jóvenes y particularmente de los adolescentes. Nunca, como en estos últimos años, los más jóvenes han asumido liderazgo en la búsqueda de un cambio radical de la economía y de la sociedad, el más radical que se ha necesitado en las últimas décadas. Greta Thumberg y la generación de Fridays for Future – agrega Bruni – han representado la novedad más importante del siglo XXI en materia de cultura del ambiente y nuevo modelo de desarrollo. Hoy estos adolescentes están en la frontera del cambio del mundo, son maestros, ejerciendo un verdadero magisterio para todos nosotros y estamos particularmente felices que los adolescentes, la profecía de Francisco, estén presentes y activos en EdF de forma significativa”.

Ralyn Satidtanasarn, de catorce años, subraya el compromiso de los chicos como ella: “ni siquiera los adolescentes y los niños pueden permitirse ignorar el mundo que los rodea. Estamos obligados a resolver los problemas de los adultos, por miedo de no tener un futuro limpio y sostenible. Los adultos deberían dejar un mundo mejor para los propios hijos. Tendrían que actuar concretamente para resolver problemas actuales como el cambio climático, la contaminación y la desigualdad”.

El compromiso de la joven tailandesa comenzó desde niña como ella misma dice: “De pequeña siempre me preocupé y me comprometí con el medio ambiente: como ciudadanos del mundo, todos tenemos una responsabilidad por la sostenibilidad. Aún teniendo, en esa época, solo ocho años, he tratado de hacer lo correcto, reduciendo el plástico y diciendo a mis compañeros de clase y a mi familia que fueran conscientes de su impacto sobre el medio ambiente.

Desafortunadamente, el activismo individual no puede hacer mucho, por tanto, decidí abordar el problema desde la raíz, a nivel corporativo y gubernamental (…). A inicios del 2022, fue prohibido, a nivel nacional, el uso de las bolsas plásticas de un solo uso a más de 70 minoristas importantes. Este fue uno de mis éxitos. Aprendí que los problemas ambientales tienen que ver con todos, por tanto, todos tenemos la responsabilidad de contribuir al cambio”.

Para Relyn, EdF es “un óptimo modo de iniciar un diálogo sobre el impacto que los jóvenes pueden tener en el clima” y va a Asís con las ideas claras sobre lo que dirá: “En primer lugar quisiera agradecer al Papa Francisco por las enseñanzas y la bondad que ha compartido en los años de su pontificado. La agradeceré también por haber sensibilizado a todos sobre los problemas actuales del mundo y por sostenido fuertemente a los jóvenes como yo, a levantar la voz y ser escuchados por las grandes personalidades, como él, que pueden ayudarnos a marcar la diferencia”.