Non Dalla Guerra regresa a Jordania con los campos de voluntariado.

“Hemos venido para regresar” es la frase que ha acompañado a los participantes del campo de voluntariado de Non Dalla Guerra, en Jordania, el año pasado.

Non Dalla Guerra (NDG), una asociación juvenil independiente con sede en Vicenza, Italia; organiza campos de voluntariado en Medio Oriente, promoviendo cursos de sensibilización en las escuelas sobre temas de guerras y migraciones. Apoya a las comunidades más necesitadas en Jordania con proyectos de escolarización y ayuda humanitaria.

«Estamos convencidos de que el diálogo y el encuentro con el otro sean las únicas y verdaderas respuestas a la violencia y al extremismo» -dice Davide Travagliani- portavoz y responsable de la educación a la paz y acompañante de grupos de voluntarios.

«Creemos en una educación para la paz que parte desde abajo, desde la sociedad civil y el mundo de las escuelas –explica nuevamente Davide- es una educación para la paz que parte de jóvenes como nosotros que han decidido no dejar lugar a la indiferencia, poniéndose en juego en primera persona».

El “campamento” se realizó en dos etapas, la primera del 23 de julio al 6 de agosto de 2022 y la segunda del 13 al 28 de agosto siguiente, donde entre las principales actividades, en colaboración con Cáritas Jordán, incluyeron el encuentro con las familias sirias e iraquíes, con la comunidad jordana y actividades con niños sirios, iraquíes y jordanos.

Abu Ali, por ejemplo, vive en un campo donde hay familias de refugiados sirios de origen beduino. Estamos en al-Mafraq, a pocos kilómetros de la frontera con Siria; estas familias, con el pasar del tiempo, han encontrado estabilidad en el campamento de al_Mafraq aunque siempre en condiciones precarias, pasando de hogares en carpas informales a casas y caravanas. «Incluso el año pasado regresamos al campamento de Abu Ali, de su hijo y de las numerosas familias que eligieron vivir con ellos» – dice Davide.

Hay quien ha encontrado personas que ya eran amigas, quien ha estrechado nuevos vínculos y quien ha hecho esta experiencia por primera vez, como Leonardo Marzioni, italiano, que cuenta: «Después de haber vivido aquellos días en Jordania, siento profundamente que, en el mundo en el que estamos bombardeados por noticias malas, es importante hacer conocer experiencias como esta».

Para Non Dalla Guerra el campo de al_Mafraq es amistad y encuentro y, es válido para toda Jordania, ¡a donde siempre se quiere regresar!

Al final de la experiencia, Non Dalla Guerra en Jordania ha dejado un pedacito de sí. Es uno de los murales creados durante la permanencia en Madaba. Está en el patio de la parroquia de San Juan Bautista. «En esta pequeña obra –explica David- de dimensión de 10 metros por 3, quisimos unir nuestra “historia” con la realidad que nos ha acogido todos estos años». Hay una flor símbolo de Jordania, el iris negro, en las fases de su vida, que simboliza el crecimiento. “Here and back again” porque a Jordania desde 2015 hemos venido para volver. Cada año este país nos acoge y nos da la oportunidad de conocer y tratar de entender lo que sucede en la otra parte del Mediterráneo. Cada año, gracias a la confianza de quienes encontramos, cuando volvemos a nuestras ciudades podemos contar lo que hemos visto y vivido. Es una historia que pone al centro la palabra “paz”, porque un mundo mejor es posible solo con non dalla guerra».

Marco, Camilla, Jenny, Anna, Matteo y Benedetta, algunos de los participantes en los campamentos de voluntarios, nos cuentan en este vídeo su experiencia de encuentro con las comunidades sirias e iraquíes en Madaba:

Non dalla guerra: http://www.nondallaguerra.it/